- Día uno
R=Porque los experimentos primero se hacen con ratas y luego en seres humanos.
¿Cómo se llama a un hombre montado en un burro?
R=Un burro de dos pisos.
- Día dos
-Señorita, ¿Dónde está el libro "Hombre, un ser perfecto"?
Y ella le contesta:
-Allá al fondo, en la categoría de ciencia-ficción.
¿En qué se parece el hombre a los caballitos de mar?
R=En que se creen potros y son unos pescados.
- Día tres
R=Estorbar.
¿Por qué los hombres tienen las piernas arqueadas?
R=Porque todo lo insignificante está entre paréntesis.
- Día cuatro
R=Hombre
Porqué existen los hombres?
R=Porque los vibradores aún no invitan las copas
- Día cinco
R=Porque para cien gramos de chorizo se tienen que llevar el cerdo entero.
Porqué los hombres hacen pipí de pie?
R=Parece que Dios ya estaba acabando de crear el universo, pero todavía le quedaban un par de cosas por repartir, así que decidió hablar con Adán y Eva.
Les dijo que una de las cosas que aún le quedaban era algo que permitiría, a quien lo tuviera, hacer pipí estando de pie. "Realmente es algo muy útil", les dijo Dios, "y estaba pensando si les interesaría a alguno de ustedes".
Adán empezó a dar saltos y le rogó, "¡Yo quiero eso! ¡Dámelo a mí, porque yo sé cómo usarlo! Me parece que es justo la clase de cosa que un hombre debe poder hacer. ¡Por favor! ¡Por favor! ¡Por favoooooor! ¡Yo quiero eso!". Y seguía pidiendo, mientras tiraba una de las mangas de la túnica de Dios.
Eva sonrió al ver esa escena y le dijo a Dios que si Adán deseaba tanto eso, debería dárselo a él. Así que Dios le dio a Adán la cosa que le permitiría hacer pipí de pie, y que lo tenía tan emocionado.
Apenas lo recibió, Adán fue corriendo a probarlo sobre un árbol, y después escribió su Nombre en la arena, mientras reía a carcajadas, encantado de lo que podía hacer con su regalo.
Dios y Eva lo estuvieron mirando un rato, y entonces Dios le dijo a Eva, "Bien, aquí tienes la otra cosa que tengo para repartir, y que creo que te pertenece. "¿Y cómo se llama?", preguntó Eva. "Cerebro", dijo Dios.